domingo, enero 1

Bienvenido 2006

Este 2006 será un año más largo. Sí, un segundo más largo que el pasado. Ya saben... cosas de los ajustes de la rotación de la tierra y otras vainas. Pero en este minuto, en que ya hemos vivido más de trece horas de este nuevo año, ha llegado el momento de hacer mi lista de buenas intenciones.

Contexto:

Cuando era harto más chica, onda 10 - 12 años, en cada uno de mis cumpleaños agarraba una de las libretitas rosadas con lapiz rosado que más de alguna amiguita me regalaba -obsequio altamente popular en esos años, en franca competencia con los memocalendarios-, y rigurosamente anotaba las cosas que me proponía mejorar de mi misma en mi próximo año de existencia. Con el paso de las semanas, la libretita quedaba olvida en un cajón lleno de cachureos, y con el paso de los años, esta práctica quedó en el olvido.

Sin embargo, esta libretita virtual me ha motivado para retomar este ritual infantil. Además, esta vez asumo el deafío de tener a la blogósfera como ministro de fe y férreo evaluador de mi fidelidad para con este listado de intenciones personales. Ojo que son intenciones y metas de cosas que quiero hacer y cambiar... los anhelos y sueños seguirán guardados.

Vamos a ver.... mmmm.... este 2006 me propongo...

Antes, debo hacer una breve confesión: hace rato que hubiera querido dejar atrás el 2005. Y es que a lo largo de sus 365 días, mi sensación predominante fue de inestabilidad, angustia y pasos estancados. Un año plano. Balance cargadito a lo negativo, salvo notables excepciones como mi vida cotidiana con C y nuestro viaje-canje-de-puntos a La Serena, la llegada de Ovillo, la salud, el debut de Catalina en mundo de los vivos, la tesis del trio maravilla, las buenas amistades, y mi reencuentro con mi historia, elementos que aportaron a la columna positiva de la evaluación final.

Hecho este acto de exorcismo del "viejo", y llena de buena onda porque el 2006 es par y me caen mejor los años pares que los impares, doy por iniciado: "El listado de intenciones 2006"

- Comer menos para bajar unos cuantos kilos
- Leer más y ver menos tele
- Escuchar más música y ver menos tele
- Terminar mi tesis
- Disminuir mi pereza y ver menos tele
- Retomar y lanzar "Multitudes"
- Cuidar el presupuesto y no gastar la plata en huevadas
- Controlar el mal genio (con dedicatoria a C)
- Ser más tolerante, consecuente y paciente
- Llamar más a mis amigas y amigos
- Expresar mis opiniones y no caer en la espiral del silencio
- Estar más informada de la actualidad
- Escribir más en mi blog

2 comentarios:

Sole Vargas dijo...

Hol-la Daniela,
veo que has acyualizado tu bog, jajaja!!!

Como que el 2005 fue más o menos nomás...
Fue en el 2005 que nos hicimos bloggeras ¿o nofre? Fue en este año que le pusimos la cara a "los cara dura", jajaja!!!
Tú me entiendes el chiste..

Fue en el 2005 cuando hicimos poesía de la vida cotidiana, con performance inlcuidas... Tú fuiste confidente y por qué no decirlo "cómplice" de muchos de mis performances poéticas unas más crípticas que otras...

Daniela... me alegro que enfrentes este 2006 con más optimismo, pues según dicen los astros este será mejor para nosotras las mujeres... Jajajaj!!! Ya tenemos a "nuestra madre" como presidenta de Chilito... Ya verás las fotos de las portadas de las revistas donde ella aparece...

En fin querida amiga... Nos vamos haciendo grandes y a veces, nos desesperamos cuando NO podemos cambiar el entorno y las mentalidades tan raaápido como quisiéramos...

Felices vacaciones de Verano...

Desde Bellaterra, Cerdanyola del Vallès,
Sole Vargas (15.25, evitando dormirme en la biblioteca y conectada al WIFI de la UAb)

Sole Vargas dijo...

Parece que escribí medio dormida, porque me comí un montón de letras...
Sucede también que me está dando todo el sol de las tres de la tarde en la pantalla y no veo casi nada...
Carlos ya se despertó y me va a quitar su ordenadooooor...
xau!!!

Acerca de mí

Mi foto
Daniela es mi nombre. @danilazcano en twitter. Periodista de profesión... docente de comunicación de vocación. El ejercicio de este blog no es más que un reencuentro con el "Querido diario:" de la infancia, cambiando la libretita rosada y con candado, por la apertura "infinita" de la blogósfera. Así, resulta sólo una bitácora... y de un bucle... por Morin, y por la genética que pobló mi coronilla.